Cada 74 minutos muere una persona en España por pobreza energética

Cada 74 minutos muere una persona en Espana por pobreza energetica

Isabel Jiménez, presidenta Fundación Luz Solidaria

Entrevista a Isabel Jiménez, presidenta de la Fundación Luz Solidaria

¿Cuál es la situación de las familias españolas?

Desgraciadamente los indicadores respecto a la pobreza energética en España han empeorado en los últimos años. El Informe de Indicadores de Pobreza Energética 2021 ha indicado que la incapacidad de las familias españolas para mantener una temperatura digna en su hogar pasó del 7.6% de 2019 al 14.3% de 2021. Y un dato de la Asociación de Ciencias Ambientales dice que cada 74 minutos muere una persona en España por esta pandemia silenciosa.

En los últimos meses, como consecuencia de la guerra entre Rusia y Ucrania, el precio de la energía y de los productos que compramos han subido muchísimo. Al final, esto es un lastre en el día a día de una población cada vez más ahogada económicamente. Más del 14 % de los hogares españoles tiene problemas para mantener una temperatura adecuada en sus hogares porque no puede hacer frente a los precios de la luz. 

¿Cuáles son los factores más comunes entre estas familias en riesgo?

Algunos de los factores que comparten las familias en riesgo de pobreza energética son: desempleo, la precariedad laboral, el encarecimiento de la cesta de la compra, la gasolina, y la energía. A este incremento global de precios hay que añadir que nos encontramos con viviendas poco eficientes en términos energéticos y que provocan un aumento de la factura de la luz. 

¿Cuánto han aumentado el número de familias en riesgo de pobreza energética?

2021 registró el doble de incapacidad -con respecto a 2019- cuando nos fijamos en el número de familias que no mantienen en su hogar una temperatura adecuada -de 18 a 22 grados-. No pueden ni encender la calefacción. Tanto es así, que la pobreza energética la sufren más de dos millones y medio de familias en España, según la Fundación Funcas y Cátedra de Energía y Pobreza de la Universidad Pontificia de Comillas. El panorama, además, no invita al optimismo. La OMS, además, asegura que entre el 30 y 50% de las muertes adicionales en la época de invierno son culpa de este problema.

¿Qué ayudas económicas existen para ayudar en este campo? ¿Cuáles son los requisitos?

Los ciudadanos pueden solicitar el bono social. Es decir, un descuento sobre la factura eléctrica. Lo pueden solicitar los consumidores que se encuentran en las tarifas del Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) y que encajen en los requisitos de consumidores vulnerables, vulnerables severos y en riesgo de exclusión social. Además, hasta el 31 de diciembre de 2023, la legislación amplía los descuentos hasta el 65% para consumidores vulnerables y hasta el 80% para los vulnerables severos. Además, se amplían los límites máximos de consumo eléctrico con derecho a descuento. 

El consumidor en riesgo de exclusión social no tiene que afrontar el coste de su factura eléctrica, y su suministro no se puede parar por temas de impagos. Un consumidor se encuentra en riesgo de exclusión social cuando, cumpliendo los requisitos para ser consumidor vulnerable severo, esté siendo atendido por los servicios sociales de una Administración autonómica o local que financie al menos el 50 por ciento del importe total de su factura (después de impuesto de electricidad e IVA) que hubiese correspondido a una facturación a PVPC (sin descuento en los términos de energía y peajes). El resto de la factura será abonado por las empresas obligadas por normativa a asumir la financiación del bono social.

Sin embargo, la CNMC apunta que un tercio de los hogares en España no sabe que existe esta posibilidad, y tenemos que conseguir que esta información llegue a los colectivos más vulnerables y especialmente a los consumidores en riesgo de exclusión social.  

¿Qué medidas lleváis a cabo desde la Fundación para ayudar a estas personas?

Las familias necesitan más que nunca asesoramiento personalizado ya que el mercado energético es muy complicado. Desde Fundación Luz Solidaria realizamos diferentes acciones: gestión y tramitación del bono social, revisión de cláusulas abusivas en sus contratos, paralizamos cortes de luz cuando tienen facturas atrasadas, negociamos planes de pago con sus compañías comercializadoras y en los casos más urgentes costeamos las facturas pendientes de las familias que son más vulnerables, especialmente cuando hay niños pequeños o personas dependientes o enfermas. Defendemos los derechos de las personas más desfavorecidas en el ámbito de la energía, ya que ellas no disponen de información ni recursos suficientes. 

La Fundación organiza la  “1ª Cena Benéfica Fundación Luz Solidaria” el próximo 9 de febrero en Madrid y destinará la recaudación al Programa de Lucha Contra la Pobreza Energética de la Fundación Luz Solidaria y a otras entidades sociales: Asociación AdELA, Asociación Española de Esclerosis Lateral Amiotrófica; Fundación Intheos; y Fundación Pequeño Deseo. Nuestro programa pone el foco en quienes más lo necesitan, y siempre nos coordinamos con la administración pública y las asociaciones que correspondan. Cualquier empresa y/o persona que quiera colaborar con la iniciativa puede inscribirse.